What makes you feel this rough river inside,
it will make you believe the thirst for a tender glance,
forgiveness for the unknown love. V.FLe costaba respirar...
-ayúdame Dmitry...,
Nastia me miraba sin búsqueda de empatía.
Esta mujer linda, de ojos de Urales,desaparecería con los primeros ruidos de la mañana,
nos había hecho tanto mal...
La conocí tantas veces,
como tantas veces me engañó,
cada caricia se convertía en confidencia,
cada confidencia en mensaje,
cada mensaje en condena.
Y yo fui verdugo de todos los últimos destinos,
Aún así, cada vez me enamoraron sus miradas
y me entretuve en sus silencios, hablando sin estar.
Me jugué el calor de otros para conseguir ese abrazo frio,
y tornarlo en revolcones sigilosos, en viajes cruzados,
en pasillos de moteles olvidados de autopistas,
con melodías tenues de radios de galena.
Donde comienza ese abismo que nos invita a dar el paso al vacío,
recojo pedazos de locura a lo largo del pasillo,
siempre me decías...me merezco que me elijan,
entre sonrisas que me cortaban la risa...
tus manos frías entre mis piernas...
el brillo de tus pupilas en medio de la estancia...
tu sudor perlado a la luz de un nombre que nunca supe...
mientras me recordabas tu río Lena, en tu Siberia olvidada.
Alguna vez pensé en olvidarme de mi mismo,
rondar por las calles y despojarme de lo que fuera mi nombre,
rendirme, hundirme, desvanecerme en lo poco que me dabas.
Hoy no quiero conocerte, se que te hiero dejándote ir,
serás la mejor de las espías, de rostro bonito,
encantadora, simpática, parca de palabras,
y serás como las buenas espías bielorrusas...
mañana no me acordaré de tu cara...
y si te cruzas conmigo en algún lugar, cierra los ojos
porque esos son los únicos que podrían traicionarte,
y entonces ya... nadie te podría perdonar.
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